Publicado por CB Ana María
Mañana Viernes 31 la  Luna llena en Piscis marca un nuevo portal de
 transformación importante .
 Piscis es el último signo de la rueda astrológica, la suma de todas las
 partes, la unidad , el final. Esta Luna marca el final  de un ciclo, la
 culminación y la síntesis de un proceso de comprensión espiritual, como
 si nuestra visión se enfocara y fuéramos capaces de ver mejor que 
antes. De alguna manera esta Luna nos revela algo que antes no 
percibíamos con claridad, y a que ahora se manifiesta como una 
revelación, como una verdad oculta que sale a la luz, como un secreto 
que se hace público. Esta Luna llena funciona como un lente que enfoca y
 que por lo tanto nos permite ver los detalles de algo que hasta ahora 
estaba borroso, poco claro, confuso o ambiguo.
Esta Luna es propicia para recapitular sobre qué situación en
 los pasados meses , o días, ha sacudido nuestro centro, nuestra 
integridad; qué situación nos ha causado miedo, tristeza, 
dolor, y nos ha enfrentado a nuestra herida; en qué situaciones hemos 
tenido que asumir nuestro liderazgo; cómo hemos usado nuestro poder; en 
qué dirección hemos puesto nuestra energía; qué propósito sostiene 
nuestro camino.
Esta Luna puede visibilizar el hecho que nos sentimos perdidos, que
 los propósitos o valores que hasta ahora nos han guiado no se revelan 
lo suficientemente sólidos o profundos para  sostenernos, que nuestro 
mundo se tambalea. Nos podemos sentir sobrellevados por la corriente con
 demasiadas opciones y caminos que tomar, sin saber cómo dirigir nuestra
 barca, sobre-estimulados o bloqueados . Si este es el caso, este es un 
buen momento para entrar en un proceso de introspección y trabajar  en 
enfrentar antiguas heridas que bloquean el flujo de la energía vital y 
creadora; es un buen momento para pedir ayuda, para iniciar un proceso 
de sanación. A lo mejor hay verdades cuyo dolor o intensidad nos dan 
miedo enfrentar y sentir y para eso la ayuda es vital. La astrología 
actual nos urge que nos movilicemso hacia este cambio, que vayamos a su 
encuentro, que no pospongamos procesos.
La Luna llena en Piscis hace una conjunción con Chirón y ángulos con Marte ahora en Escorpio,
 y con Urano y Pluto, que están camino a hacer su segunda cuadratura, 
exacta el 19 de Septiembre. Bajo esta configuración esta Luna puede 
manifestar hacia afuera capas hasta ahora invisibles, o poco claras, 
vinculadas a nuestra herida, tanto personal como colectiva. Esta Luna 
también está vinculada al poder de las intenciones ocultas en nuestra 
vida, propias o en nuestro entorno, a lo tóxicos y destructivos que son 
los secretos y a la conciencia de que lo que pensamos , aunque no lo 
decimos, tiene un impacto en nuestro ambiente.
Estamos a punto de culminar la mitad del año astrológico,
 el próximo 21 de Septiembre. Dos días antes Pluto y Urano estarán 
nuevamente alienados en un ángulo de noventa grados , tránsito que ya 
experimentamos el 24 de Junio . Durante la cuadratura de Junio, Urano 
estaba directo y Pluto estaba retrógrado, lo que le dio un tono más uraniano
 a la energía de esta primera cuadratura. La energía de Urano nos 
moviliza al cambio súbito e inesperado, nos trae un elemento de 
la sorpresa e innovación. Urano en Aries nos da la capacidad de saltar, 
de dar el paso, de girar la rueda, de movernos va hacia lo nuevo. ¿cómo 
se ha manifestado esta energía en nuestra vida? ¿ la reconocemos? ¿ está
 activa?
 
En Junio, la energía de transformación profunda de Pluto estaba más latente,
 como telón de fondo a la energía de Urano. Ahora, en Septiembre, con la
 segunda cuadratura, Urano estará en movimiento retrógrado y Pluto 
estará directo, lo cual nos indica que sentiremos más activa la energía 
de Pluto y más latente la de Urano. A partir de esta Luna llena  en 
Piscis Pluto cobra fuerza y nos lleva por un proceso de transformación 
radical muy potente, que abre esta nueva temporada astrológica y que nos
 acompaña hasta el umbral del fin de año.
 
Este es un tiempo para mirar de frente aquello que nos da miedo,
 que nos produce rechazo, que nos causa tristeza  o nos produce enfado :
 realidades que nos enfrentan a nuestro propio autoengaño, proyecciones 
de nuestra mente y de nuestras ilusiones, lugares en los que tenemos que
 aprender a enfocar y mirar la realidad tal cual es con aceptación, 
conciencia y amor . Este es un proceso de tomar responsabilidad por todo
 lo que sentimos y pensamos, lo que decimos y actuamos. Esta Luna nos 
invita a hacernos concientes de cómo manejamos nuestra energía y de cómo
 usamos nuestro poder : de cómo contribuimos a la vida de los demás ; de
 cómo participamos; de cómo entregamos nuestro poder; de cómo 
necesitamos la energía de los demás; de cómo estamos en situaciones en 
que nos sentimos abusados o manipulados, engañados o traicionados.
Esta Luna alumbra e ilumina una verdad y nos aporta  una comprensión que nos libera.
 Esta comprensión tiene que ver con nuestra capacidad de soltar y de 
transformar la energía del miedo y la duda en energía de amor y 
confianza. Cuando nos damos cuenta que tenemos el poder de cambiar cómo 
nos sentimos ante una situación y cuando adquirimos la maestría para 
transformar nuestra energía interna, hemos adquirido una comprensión 
vital para nuestra sobrevivencia. Este proceso es el que nutre nuestra 
confianza en nosotros mismos y nos permite creer y crear.
Esta Luna en Piscis también puede hacer visible nuestras fortalezas y nuestro adelanto en nuestro proceso de crecimiento. Nos
 puede revelar un nuevo nivel de aprendizaje, cosecha de nuestra 
práctica y compromiso. Este puede ser un ciclo que cerramos con una 
visión más clara y profunda  y con una mayor capacidad de tomar 
decisiones desde la intuición, de crear . Esta Luna puede revelar 
nuestra adaptabilidad al cambio, nuestra capacidad de fluir y de 
responder a las oportunidades con conciencia, apertura y gratitud. Nos 
podemos dar cuenta que hemos adquirido la capacidad de adaptarnos a los 
cambios y de navegar de manera fluida y armoniosa, gracias a una 
intención clara para nuestra vida , un propósito que nos guía y nos da 
dirección, una práctica, un compromiso, un camino de servicio.
Si este es el caso, este es un tiempo de poder personal al 
servicio de la comunidad en que tenemos a nuestra disposición un alto 
potencial creativo de manifestación. La clave para tener acceso
 a este poder creativo está en la impecabilidad del camino entre lo que 
decimos y lo que caminamos que se manifiesta  en armonía, paz y amor. La
 clave para manejar la energía de los próximos meses está en nuestra 
integridad. En poder sostener nuestra verdad, abierta, transparente, sin
 nada que ocultar, sin agendas escondidas. Si tenemos algo que esconder,
 si solo hablamos medias verdades, si no somos claros en nuestros 
intercambios energéticos, si somos ambiguos y tenemos segundas 
intenciones, sean estas concientes o inconcientes, se presentarán las 
situaciones necesarias para que nos demos cuenta de que el manejo de 
nuestro poder y de nuestra energía nos está alienado con el bien común.
Bajo está Luna llena Venus se encuentra en Cáncer, Marte en Escorpio y la Luna en Piscis, activando
 los tres signos de agua. Este puede ser un tiempo de mucho movimiento 
emocional y sentimental. Muchos corazones rotos sanan sus heridas, 
muchas almas tristes lloran su camino de vuelta a casa; muchos se 
despiden de la víctima; muchos recuperan la alegría de vivir; muchos 
enfrentan duelos y pérdidas; muchos se abren al amor ; muchos se sanan; 
muchas almas recuerdan; muchos se liberan de adicciones y se hacen 
responsables de sus pasos. Son tiempos tumultuosos tanto adentro como 
afuera, para todos y todas. La Luna Llena en Piscis apoyada por Venus en
 Cáncer nos invita a sentir, a entregarnos a sentir, a vencer el miedo a
 sentir profundamente y a adentrarnos con valentía ahí donde duele; nos 
invita a liberar las emociones más ocultas para abrir paso a  la energía
 de la creatividad  a la inspiración que nace de nuestra conexión 
espiritual. La Luna en conjunción con Chirón nos habla de una herida 
espiritual colectiva a nivel de nuestra alma planetaria que culmina un 
proceso de sanación y que abre un nuevo nivel de conciencia hacia nuevos
 proceso y nuevos territorios no explorados. Estos territorios tienen 
que ver con la recuperación de nuestra confianza espiritual de que 
podemos usar nuestro poder sin culpa para crear una realidad de Amor y 
Paz. Las lecciones que se avecinan están vinculadas a estos temas.
Marte, ahora en Escorpio, abre el camino para la entrada de 
Saturno en este signo, el 6 de Octubre, y donde estará durante dos años y
 medio. Entramos en una fase en que vamos a aprender a poner 
nuevos límites energéticos a influencias que hasta ahora nos han 
controlado y manipulado; vamos a aprender a ser impecables en nuestro 
manejo de la energía sexual, del dinero y de nuestro poder y a 
reestructurar nuestras creencias aprendidas con relación a estos temas. 
Este es un periodo en que se puede hacer mucho más evidente la 
manipulación a la que hemos estado sometido por las estructuras de poder
 que han usado nuestra insatisfacción y nuestra carencia para controlar 
nuestros deseos y nuestro poder material a través del consumo 
innecesario y desmedido.
A partir de esta Luna  entramos en una fase de depuración emocional, de
 mucha purga de temas dolorosos de nuestro pasado disfuncional. Escorpio
 va hasta lo más profundo y oculto, destapa secretos, temas tabús, 
vinculado  al sexo, al poder y al dinero. El nodo norte de la Luna acaba
 de hacer su entrada en Escorpio por lo cual, durante un año y medio, la
 flecha de nuestro camino evolutivo apunta hacia este signo. A nivel 
colectivo podemos esperar que muchas verdades hasta ahora ocultas o 
turbias salgan a la luz. Escorpio está vinculado a la corrupción, a la 
explotación y al abuso de poder.
La astrología actual nos habla de que se pueden presentar situaciones importantes para nuestro crecimiento
 y nuestra evolución que vienen a desafiar nuestra estabilidad 
emocional, nuestra confianza a través del miedo a la pérdida. A medida 
que nos adentramos en la astrología de otoño e invierno (primavera y 
verano en el hemisferio sur) iremos experimentando oportunidades de 
observar cuán atados estamos a estructuras emocionales del pasado, 
cuánta carga (karma)  llevamos sobre nuestros hombros, cuántas deudas 
materiales bloquean nuestra capacidad de ser libres, qué rol juega la 
comodidad en nuestra actitud de vida.
A nivel interno la energía de Escorpio nos enseña a 
 ir a lo más oscuro, a vencer nuestros fantasmas y demonios, nuestro 
miedo a la muerte, hasta encontrar la verdad que nos libera. Escorpio 
nos dice que esta verdad está más allá de la materia y de nuestra 
percepción , que hay otros mundos invisibles y que estos otros mundos 
energéticos nos influencian .
Es un proceso de aprendizaje que cuando descubrimos que no lo podemos controlar,
 que nos tenemos que entregar, que podemos aprender a volver a sentir 
sin morirnos en el proceso, que podemos dejar ir partes de nosotros, que
 nos podemos despedir de situaciones y personas , que no nos tenemos que
 sacrificar, entonces descubrimos que hay un canal abierto de conexión 
directa en nuestro corazón y con el corazón de la Tierra y del universo,
 que somos uno. Uno con el Cosmos, uno con la Tierra, uno con todos los 
seres vivos con quienes compartimos la vida en este planeta.
La Luna llena en Piscis nos invita a fortalecer nuestros votos de Amor , de Fe y de Esperanza,
 y a  invocar las fuerza del Amor incondicional, de la compasión y de la
 aceptación de que estamos recordando nuestro origen espiritual, y 
recuperando nuestro poder como creadores. A través de la belleza, de la 
armonización, de la danza, el canto, el rezo, la ceremonia, el compartir
 con almas afines desde una misma intención, un mismo rezo, bajo esta 
Luna podemos invocar las fuerzas del Amor , de la Unidad, de la 
Creatividad Divina ,  de la Paz y de la Armonía Planetaria. Los próximos
 meses requieren que estemos bien alineados en la sinceridad de nuestro 
propósito compartido. Esta Luna llena celebra la Unidad con Todo y el 
Gran Misterio y nuestra parte fundamental e imprecindible en todo lo que
 acontece . Cada corazón es un tesoro.