RECONOCIENDO MIS SOMBRAS

Este concepto lo traigo a colación, porque sirve para descifrar las trivialidades de la vida.

Trivial: Del latín trivialis, trivial es un adjetivo que permite nombrar a algo común y sabido por todos. Se trata de algo vulgarizado, que no sobresale de lo ordinario y que carece de importancia o novedad.

Recuerda que todo lo que decidas hacer desde el corazón o guiados por la intuición, nunca falla, siempre creas en todo lo que crees.

En la vida lo importante no es saber lo que uno tiene, es saber lo que vales.

Haces el balance de tu vida para entender los enfados que has pasado en estos últimos días, el estrés en el trabajo, vives en constante inconformidad con lo que realizas, nunca buscas el lado positivo que te lleva a dar gracias por todo lo que tienes.

Empiezas a valorar eso cuando lo que sentías que era importante en tu vida, ya no lo es, que a las personas hay que prestarles un poco más de atención, escucharlas, amarlas, sentirlas, pedirles perdón si en algún momento has herido, reconocer que siempre estuviste dando todo lo mejor de ti para los que están fuera,  los que en realidad conviven contigo han recibido poco de lo que realmente eres. 

Reconociendo todo esto, buscas reparar ese daño tratando a los seres más cercanos a ti de una manera diferente, siendo entrañable, dedicando tiempo para compartir con ellos, haces menos horas de trabajo, destacando aún más ese amor que tantas veces demandaron, pero que no había tiempo para dárselos porque habían otras prioridades.

Qué grato es poder reconocer que aunque no lo hacías de manera premeditada y con alevosía, era un daño que iba calando en cada uno de los seres que te rodeaban, mermando esas ganas de estar a tu lado. Tiene un mérito muy grande que puedas despertar a tiempo para apoyar y guiar a todos lo que siempre estuvieron contigo, valorándote y respetándote de manera incondicional, llenando de amor sus corazones para entender todo tu proceso, porque eso que ahora estas dando es lo que verdaderamente eres.

Sin lugar a dudas, puedes decir con mucho orgullo que valió la pena pasar por todas esas vicisitudes para llegar a ser quien hoy en día eres, porque quizás nunca te hubieses dado cuenta de todas las bendiciones que tenías en la vida, por siempre estar mirando a otros y nunca tu interior, no escuchar tu intuición y menos a los seres amados. Descubre ese gran ser que eres, y trabaja en lo mejor de ti, disfruta al máximo cada momento que vives, mira la vida desde otro prisma, saca el mayor partido a todo lo que eres y empieza a vivir en plenitud.

Abrazos energéticos de LUZ y AMOR.