Todo es cuestión de actitud.

Así son las cosas de la vida.

Van pasando los años y qué difícil es reconocer todas las vivencias tenidas hasta ese momento.

Hace mucho tiempo que no recurro a nadie, todo lo resuelvo por mí misma, tal vez dejando en un lugar oscuro los sentimientos, sin mostrarlos para no sentir la traición o el dolor de un desengaño. He dejado de confiar, quizás sea por exigencia propia o por sentir una traición que ha dolido mucho, que ha roto mi corazón, esa brecha que ha quedado, aunque hayan pasado los meses,  sigue aún sin cicatrizar.

Noto mi abandono, pensando resolver la situación todo mi aspecto ha quedado físico, personal e interior se queda de lado, no sé cómo resolverlo, la situación me sobrepasa, no encuentro satisfacción en nada de lo que hago, no logro ver la salida.

Como seres que tenemos cierto grado de madurez, debemos pedir ayuda y mostrar el lado vulnerable, dejar de lado ese ego que nos incita a pensar que todo se debe hacer por uno mismo.

Debo sentir que puedo empezar a confiar, y dar un cambio a la vida que llevo hasta ahora, dejar ese miedo.

Empezaré a abrirme y mostrarme como lo que soy, un ser íntegro tanto por dentro como por fuera, aprender a decir; te quiero, me preocupo por ti y siento miedo de decirlo.

Anda, levántate, saca todo ese potencial que llevas dentro, en tu interior, si tienes que llorar, hazlo, sin estarte reprimiendo por el que puedan juzgarte, siempre tendrás esa persona a quién pidas ayuda para tenderte esa mano amiga, no pienses que eres una carga pesada. Siéntete bien, hay días que son más fáciles que otros.

Busca hablar, ten una charla con una persona entrañable que pueda sentir empatía contigo, o escribe todo aquello que te mantiene en ese estado de tristeza, nostalgia o apatía, suelta todo eso que llevas dentro, no te sabotees tan fuerte, esa dureza no te conduce a nada, quizás no te has dado cuenta de todas las personas que se han preocupado por ti, los que han querido ayudarte. Tal vez has pasado de todo y de todos, pensando que han sido crueles contigo, porque las palabras que otros te han dicho son para que vayas entendiendo que la vida hay que vivirla para tener el coraje de salir adelante.

Es importante que las cosas te vayan bien, está claro que es tu decisión, permítete que te acepten tal cual eres aunque tengas que respirar hasta tres, antes de soltarles ciertas cosas.

Aunque te duelan ciertas palabras, tienes que aprender a dar y recibir amor, entiende que no todos somos iguales que si tienes alguien a tu lado que quiere orientarte, apoyarte y guiarte, puedes reinventarte y tener una mejor experiencia en la vida.

Decide de una vez hacer ese cambio que has pedido, sabes que vas a estar bien, transfórmate por tu bienestar. En la vida tenemos momentos: buenos y malos, lágrimas, risas, pero cada día debemos sacarnos el mejor de los partidos.

Reconoce lo que hace falta en tu vida y agradece todo lo que tienes.

“Cuando aprendes a aceptar en vez de esperar, tendrás menos decepciones”.

Abrazos energéticos de LUZ y AMOR.